viernes, 30 de octubre de 2009

¡Fin de año!

Fin de año... fiscal, en este caso.

Para celebrar tan marcado acontecimiento, la empresa ha organizado una fiesta al modo de fin de año natural: música, carpa, alcohol...

Aunque eso erá a la noche (que para ellos empieza a las 17:00h, claro). Pero durante todo el día, tenemos a nuestra disposición una suerte de carreta (como las que van por las fiestas en España y venden churros), que vende oliebollen y appelflappen.



Por lo que parece, estos pasteles cubiertos de azúcar (algunos con manzana, pasas y salsa de cinamomo) son típicos del fin de año normal (el 31 de diciembre), y de ahí que se estiren y nos los den gratis, a modo de analogía. Afortunadamente, este circo solo ocurre una vez al año.

miércoles, 28 de octubre de 2009

El sol de Breda

El pasado fin de semana me invitaron a un cumpleaños en Breda. Si te suena el nombre tal vez sea por la batalla que se libró aquí durante el siglo XV y que de alguna forma Arturo Pérez-Reverte relata en el libro que lleva el mismo título que este post.

Si no, tal vez te suene por el cuadro La Rendición de Breda de Velázquez.

La ciudad tiene un claro carácter sureño, al estilo de Maastricht (aunque está más lejos de Maastricht que de Ámsterdam). Se nota la diferencia con Ámsterdam y el norte en general, puesto que las casas y edificios son más anchos y su forma es diferente a las de aquí. Abundan las fachadas en madera, escasean los canales y las calles son estrechas. Todo el entorno, en general, tiene una solera que Ámsterdam o los pueblos del norte no tienen; está todo más cohesionado.

La gente es más abierta y, aunque no distingo acentos, también habla diferente, como más relajada y divertida. Por lo demás, mantienen el estándar holandés: gente alta, rubia, de ojos azules y que habla idiomas.

Las cosas son más baratas y no cobran por entrar en el baño.

La única foto razonable que hice es de una fortaleza que allí llaman "de los españoles", pero que nadie supo contarme quién o qué hubo allí para que la llamen así hoy en día.



¤ ¤ ¤

Al margen de eso, el viaje hasta allí fue una pequeña odisea. Resulta que están de obras en las vías de la zona centro del país, así que para ir hasta allí desde Ámsterdam, fuimos haciendo zig-zag y solo nos llevó 3 horitas de nada. Y 2 transbordos, en uno de los cuales, casi dejamos atrás a uno de los integrantes del grupo...

Y el domingo, como se ve en la foto anterior, pude disfrutar del sol de Breda, dando un paseíllo hasta la estación y aprovechando el calorcito que da por la mañana en otoño.

martes, 27 de octubre de 2009

Space invaders

Venga, hoy, entrada interactiva (o telepática).

El que conozca de qué va esto, que lo disfrute y si está inspirado, que lo explique en los comentarios.

domingo, 25 de octubre de 2009

Juegos... ¡en castellano!

Supongo que a estas alturas todo el mundo se ha encontrado alguna vez jugando en los bares a alguno de los juegos que se pueden encontrar en las máquinas con pantalla táctil. Bueno, pues hace unos días me acerqué a ver cómo llamaban al Trivial aquí... y, ¡oh sorpresa!, me encontré el trasto en castellano.

Para muestra, un botón (bueno, o la foto del artilugio en román paladino).


viernes, 23 de octubre de 2009

Ámsterdam desde lo alto

El domingo pasado se me dio por lucir palmito cultural. O lo que es lo mismo, fardar de intelectual. Así que me fui hasta la biblioteca que han abierto hace poco al lado de la Estación Central.

Esperando que aquello estaría desierto y podría tener una tarde en el más absoluto relax, me fui hasta la otra punta de la línea del metro y luego caminé bajo una lluvia incipiente hasta la bibliotheek en cuestión.

Y resulta que estaba de bote en bote. Gente tirada por los suelos, los ordenadores ocupados, gente con su portátil... vamos, que había tanta vida allí el domingo como en cualquier plaza de abastos española un día de semana. Pero no es eso lo único sorprendente.

Primero: 7 plantas. Cada planta tiene su propósito y su temática: filosofía, literatura, ciencias... Luego, cada planta tiene su propia distribución y cantidad de estanterías y chorraditas varias de decoración, con su leyenda en holandés e inglés. Sofás, ¡colchones¡, butacas individuales, salas de relax integradas por sillones con orejeras y con telas de gasa a modo de visillos colgando del techo, ordenadores de libre disposición, wi-fi... y para los medios audiovisuales, terminales provistos de auriculares y pantallas de muchas pulgadas.

Todo, por supuesto, de diseño holandés. Así, por ejemplo, hay cápsulas "de estudio", que consisten en un cubículo de (así, a ojo) 1.5mx1.5mx2m construido en fibra de vidrio, con dos tableros a modo de banco y mesa en su interior. O la hemeroteca, con estanterías en grada, de forma que si te pones a leer una revista estás "delante" de la estantería del piso siguiente, pero "sobre" la estantería de tu piso actual, con lo que se ven las cabecitas por encima de las estanterías... muy gracioso.

En las zonas de "trabajo", la gente se dejaba llevar y estaba "como en su casa": sin zapatos, tirada en los sofás y colchones, hablando en tono normal con sus compañeros... Todo muy natural, vaya.

La última planta es una cafetería con una terraza pequeñita, desde la que hice las fotos que pongo a continuación.



Uno de los veleros que se ve en una de las fotos, lo saqué antes de ir hasta la biblioteca, porque me acerqué hasta allí.

miércoles, 21 de octubre de 2009

La fiesta más triste

Esta semana es algo "festiva" para los chavales en el colegio, creo, y por eso hay ferias, atracciones y barracas en las plazas de mi pueblo y Ámsterdam.

La cuestión es que, como dejan entrever las fotos a continuación, tampoco es que las disfrute mucha gente. ¿Será la crisis?

martes, 20 de octubre de 2009

La temporada de los erizos

Y no me refiero a los de las castañas... que por cierto por aquí no he visto castañeros.

¡Qué pasada! Llevo viendo erizos cada tarde/noche durante las últimas 2 semanas. Para muestra, la foto del primer erizo holandés que me topé.


sábado, 17 de octubre de 2009

¡Me ha tocado la lotería!


¡Sí, sí, sí! El otro día compré Staatsloterij, o lo que es lo mismo, la lotería del Estado. Compré un quinto (para los de la LOGSE, no es una botella de 20cl. de cerveza, sino la quinta parte de un décimo de lotería), que vale 3€, así que tampoco esperaba que me tocase mucho. Con todo, si hubiera comprado el billete entero (150€), habría jugado por 27,5 millones de euros. Con mi participación, "solo" una quinta parte de 5,5 millones. O algo así (que yo soy de la LOGSE y no entiendo muy bien todavía cómo va esto).

En cualquier caso, hoy he ido a mirar si me había tocado algo, y me dieron la buena noticia de la mañana: ¡tenía premio! ¡1€!

Me ha invadido la felicidad al conocerlo. Claro que al cobrar mi euro me he sentido ridículo y le he dicho a la estanquera que ponía otros 2€ y que me diera otro número para el mes que viene.

Por la noche subo una foto con el número premiado.

Editado: ya está subida

jueves, 15 de octubre de 2009

Cortar por lo sano

Hace días que me quejaba (en mi fuero interno), de unos árboles que había cerca de mi casa. Estaban en plena acera y, al llegar el otoño, daban unos frutos que caían en la acera, invadiéndola de una cosa pringosa de color marrón bastante desagradable. Lo peor ocurría cuando pisabas los frutos en cuestión, porque reventaban impredeciblemente y te ponías de pringue hasta las cejas (o bueno, literalmente, hasta las rodillas). Hasta tal punto que hacía ya días que caminaba por la carretera al llegar a su zona, para evitarlos

Pero hoy me he llevado una grata sorpresa al ver que no debía de ser el único que los padecía y que algún operario del Ayuntamiento ha acabado con el problema... por el pie.



Y yo se lo agradezco.

miércoles, 14 de octubre de 2009

Ya llegó el invierno

Sí, efectivamente. Si te has sorprendido de que hace menos de un mes dije que había llegado el otoño... te aguantas. ¡Hace un frío que afeita!

Hoy he ido a trabajar con la braga hasta las orejas, las manos en los bolsillos y escarcha en las pestañas. He visto la primera helada de la temporada e incluso los campos entre las casas estaban blancos.

Lo mejor: ¡todo de ayer para hoy! Y luego, en la empresa he estado todo el día en manga corta. ¿¡Así quién no se resfría (lo cual no quiere decir que quisiera que quitaran la calefacción)!?

Además, ahora mis compañeros de trabajo me han metido el ansia del frío en el cuerpo. Me han dicho que cuando los canales se hielan, ¡se puede patinar en ellos! ¡No veo el momento!

Seguiré informando al respecto.

Por cierto, lleva 1 semana sin llover. Todos insisten en que he llegado en un año "tropical".

sábado, 10 de octubre de 2009

Espera en Barcelona


En el viaje de vuelta, tuve tiempo de sobra para recorrer e investigar sitios de la nueva terminal 1.

Así, comí en un bar que se llama "La Dehesa" o algo parecido, en pleno centro de la terminal. Pillé un plato de ibéricos, que acompañaron con una montaña de rebanadas de pan untado en aceite de oliva y una ensalada. Todo sorprendentemente rico y no excesivamente caro (¿tal vez estaba preparándome para volver a Ámsterdam?).

Además, pude descubrir que en esa terminal el espacio para fumadores está al aire libre. O lo que es lo mismo: puedes esperar a tu avión tomando el sol, por ejemplo. Dan testimonio de eso las fotos que dejo a continuación. En la segunda se puede ver que han plantado lavanda para paliar el olor del tabaco.


Y para terminar, la última foto que hice en territorio nacional.

viernes, 9 de octubre de 2009

Curiosidades de mi pueblo

Hoy solo quiero dejar por aquí un par de escenas que me he encontrado paseando por mi pueblo.



La primera es el nombre de una calle, Fokkerlaan, que no he podido dejar de asociar con su parecido en inglés fucker land.



La otra, yo creo que es donde reciben a la suegra en esa casa. Tiene la estancia más grande de la casa, desde luego.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Visita al Ikea

El sábado pasado fui al Ikea y, a falta de una foto mejor, solo puedo poner la de la entrada del párking.



Por 30€ escasos, me compré una barra para colgar la ropa, estanterías para colgar de ella, un kit de herramientas, una sartén, una manta y unas perchas.

Me pasé allí un día entero. Comí allí y todo. Es increíble la cantidad de cosas que pueden vender en semejante pabellón y cómo, al final, consiguen que tú las veas.

El problema es que es un vicio y ahora tengo que volver porque se me quedaron cosas en el tintero... que no tenía pensado comprar, pero que finalmente sí que compraré :-D. Llámalo "la era del consumismo".

martes, 6 de octubre de 2009

Ya llegó el otoño

Hace días ya que no me puedo permitir el lujo de andar en manga corta. Pero estas últimas jornadas, no he podido dejar la cazadora en casa.
 

Las hojas de los árboles ya empiezan a caerse, hace viento a cada rato y ya no vuelan tantos pájaros.

Aunque los días se han hecho también más cortos (a las 19:00h ya es de noche), también se pueden disfrutar puestas de sol.


Claro que tampoco hace demasiado sol, que se diga. Aunque la lluvia no amilana a los súper-planificados holandeses y siguen pedaleando... aunque tengan que recrear el cuento de Caperucita Roja.